La zona del desierto de Atacama es uno de los parajes con mayor belleza natural que conozco.
El viaje en autobús desde la ciudad argentina de Salta hasta San Pedro de Atacama ya es toda una atracción en sí mismo. Desde la carretera se divisan montañas nevadas, paisajes desérticos, lagunas altiplánicas y hasta esta enorme salina, que todos los pasajeros estábamos fotografiando:
El municipio de San Pedro de Atacama es pequeño y muy turístico. Está cerca de montañas, géiseres, lagunas, salares, termas, dunas para hacer sandboarding y un sinfin de cosas más. Las cuatro calles del pueblo están llenas de hospedajes y empresas que ofrecen tours a todos estos lugares.
El desierto de Atacama es el más árido del planeta. En su sector central, se han registrado hasta cuatro años sin lluvias. No faltan carteles que recuerdan que se debe hacer un uso responsable del agua.
Yo no tuve mucho tiempo para visitar la zona y por desgracia me quedé sin ver muchos de los lugares de interés. Pero lo que sí hice fue alquilar una bicicleta y pedalear hasta uno de los más conocidos: el Valle de la Luna. Este paraje desértico forma parte de una Reserva Natural.
En este parque hay un circuito que pasa por salinas, un cañón, montañas y formaciones rocosas.
Pero tal vez la estrella del Parque Natural es la duna mayor: